25.5.06

"Aquí no hay desaparecidos" fué, durante treinta años,
la versión oficial en el Uruguay.
Ahora empiezan a aparecer. Muertos en la tortura,
enterrados en los cuarteles. En el sepelio del primer
aparecido de los detenidos desaparecidos, que el 14 de
marzo de este año congregó a un multitud en las calles
de Montevideo, habló Eduardo Galeano:

... "La realidad es un desafío... La realidad es real
porque nos invita a cambiarla y no porque nos obliga a
aceptarla. Ella abre espacios de libertad y no
necesariamente nos encierra en las jaulas de la fatalidad.

...Esta jornada, más que sepelio es una celebración.
Estamos celebrando la memoria viva de Ubanesger y de todas
y de todos, las mujeres y los hombres generosos que en este
país enviaron su fuego hasta el final,
los que nos siguen ayudando a no perder el rumbo,
a no aceptar lo inaceptable,
y a no resignarnos nunca,
y nunca bajarnos del caballito lindo de la dignidad.
Porque en las horas más difíciles,
en aquellos tiempos enemigos,
en los años de mugre y miedo de la dictadura militar,
ellos supieron vivir para darse y se dieron
se dieron sin pedir nada a cambio, enteros,
como si viviendo cantaran aquella antigua
copla andaluza que decía,
y dice todavía, por siempre dice:
Tengo las manos vacías,
pero las manos son mías.

21.5.06

TEOLOGÍA


Fe de erratas: donde el Antiguo Testamento dice lo que dice,
debe decir lo que quizá me ha confesado su principal
protagonista.

Lástima que Adán fuera tan bruto. Lástima que Eva fuera tan
sorda. Y lástima que yo no supe hacerme entender.

Adán y Eva eran los primeros seres humanos que de mi mano
nacían, y reconozco que tenían ciertos defectos de estructura,
armado y terminación.

Ellos no estaban preparados para escuchar, ni para pensar.
Y yo... bueno, quizás yo no estaba preparado para hablar.
Antes que Adán y Eva, nunca había hablado con nadie. Yo había
pronunciado bellas frases, como Hágase la luz, pero siempre
en soledad.

Así que aquella tarde, cuando me encontré con Adán y Eva a la
hora de la brisa, no fuí muy elocuente. Me faltaba práctica.

Lo primero que sentí fué asombro. Ellos acababan de robar la
fruta del árbol prohibido, en el centro del Paraíso.

Adán había puesto cara de general que viene de entregar la
espada y Eva miraba al suelo, como contando hormigas.

Pero los dos estaban increíblemente jóvenes y bellos y
radiantes.

Me sorprendieron. Yo los había hecho, pero yo no sabía que
el barro podía ser luminoso.

Después, lo reconozco, sentí envidia. Como nadie puede darme
órdenes, ignoro la dignidad de la desobediencia.

Tampoco puedo conocer la osadía del amor, que exige dos.

Entonces, vinieron los equívocos. Ellos entendieron caída
donde yo hablé de vuelo.

Creyeron que un pecado merece castigo si es original.

Dije que peca quien desama: entendieron que peca quien ama.

Donde anuncié pradera de fiesta, entendieron valle de
lágrimas.

Dije que el dolor era la sal que daba gustito a la aventura
humana: entendieron que yo los estaba condenando al
otorgarles la gloria de ser mortales y loquitos.

Entendieron todo al revés.

Y se lo creyeron.


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14.5.06

una mariposa

vuela

se mueve


en eso anda



-Guillermo Daghero-
/la eme/

11.5.06

"No quiero amor refinado. Lo quiero crudo,
espeso, sucio, completo."
-Miriam Reyes-

7.5.06

Siempre me pregunté dónde estaría la fuerza de las
ideologías (y llamo ideología a toda forma de ideología),
para convencer a la gente de tantas cosas absurdas y
obligarla hasta a dar la vida por ellas. Y nunca había
encontrado respuesta hasta que me di cuenta que esta
clase de preguntas sólo puedo contestarlas mirando hacia
mí mismo.
En algún tiempo yo también profesé algún tipo de esas
colecciones de ideas ajenas, y también yo traté de
imponerlas a los demás. Me miro a mí mismo en aquellos
tiempos y pienso: ¿por qué lo hacía?
Con éste método es muy fácil encontrar una rspuesta: lo
hacía, descubro, porque para poder vivir en el mundo me
parecía más fácil arreglar el mundo que arreglarme a mí
mismo.

Mario Levrero.

4.5.06

Una conciencia limpia es señal de una mala memoria


... ("jugo de luna me diste de tomar. Voy por más"
Cerati -Ahí vamos-)